Mostrando las entradas con la etiqueta rutina. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta rutina. Mostrar todas las entradas

miércoles, 3 de octubre de 2012

Un poco de Sinestesia por favor…


Más disposición al gusto de percibir letras impresas. ¿A qué les sabe desear? A sueño, a recuerdo ¿Saben? ¿Sabe? Se necesita probar más riesgos para contar contrastes nuevos. ¿Cuál es la textura del Rock al acariciar melodías? Todavía algunos lloran por los colores que no están a la vista. El hambre nace de una ansiedad no saciada que al saciarse demasiado se le llama adicción. ¿Hay balance? Inafirmable. Pero a veces sirven los excesos cuando se calman con arte. Hace tiempo que no comemos versos caseros y se ha dejado de sentir mucha música, porque no mucho se escucha en los alrededores; las calles callan con sus bullas una ciudad y sus atardeceres… Unas cuantas bocanadas de piano pueden servir de ánimo, así como una historia de amor del siglo diecinueve bajo párrafos de alguna buena novela… Huele a olvido, pero la mayoría carga su atomizador obligado. A trabajar y a obedecer en masas, para sentir no se nos paga. Muchas percepciones se han pasado al bando de las patologías, ahora todo parece enfermedad. No sanen, no ha llegado el día de la quincena tampoco…






Nota y note: los puntos suspensivos son para suspirar. Suspire y evoque…

"Flores amarillas constelan un círculo de tierra azul. El agua tiembla llena de viento" Alejandra Pizarnik (25/SEP)

sábado, 26 de febrero de 2011

El tiempo y su orquesta...


Como quien maneja en carreteras de doble vía y múltiples destinos, se sienten las muecas y los gestos fugaces. Se navega a diario por los rostros y sus expresiones, sobre los mares de las calles y los puertos del día a día. Se escuchan los acordes que forman la concurrencia de voces; el crescendo, sus solistas y coros que a veces coinciden y otras desentonan…


Las palabras se aprovechan del evento y los pensamientos juegan al salto de mente en mente, esos que nos cambian los momentos; como cuando se camina hablando solo, o cantando; y de repente: nos topamos con una sonrisa que nos alegra día, o simplemente nos tropezamos y nos toca disculparnos…


Es en circunstancias así donde algunas letras, vestidas de palabras escritas, rompen la sinfonía y se infiltran en la rutina: cuando nos es entregado el panfleto que no deseamos, cuando los grandes titulares atacan nuestras verdades de anoche, o del antes; o cuando las paredes son un medio de expresión, sea protesta o alabanza…


De esta manera, el tiempo, director de esta orquesta, dirige y nos dirige; sin aplausos, pero a veces, con buenos gestos y buenos ratos…


martes, 2 de noviembre de 2010

De vuelta a la rutina…


Sol con lluvia dan la bienvenida al día y a su concurrencia de rutinas; a lo cual se le incorporan unos cuantos pasos de zapatos, tacones y sandalias. Pensamientos de fe y desesperanza agregan ruido a las calles y se unen a bocinas de vehículos para los ya clásicos acordes disonantes; nos abstraemos con la música individual y nuestros pensamientos de labios sellados. Vamos al trabajo, al colegio; a la institución universitaria…


Se repiten las caras y las frases, así como las historias del día anterior. El futuro cercano que no se acerca lo suficiente, y el que deja de ser futuro para ser presente…


Mi cuerpo, que reúne unos cuantos pasos adicionales a los de siempre, toma ventaja para sentir un poco el agua que cae de los cielos, y de cierta forma sumar a la piel el sentimiento de las nubes: una gota que se aloja en el cristal del lente, para recordar las veces que he llorado; unas pocas descansan en mis labios, para las veces que he besado; otras buscan asilo en la ropa, para recordarme el calor con frio; y otras se esconden en mis pies, para no olvidar el camino que sigo…



De vuelta a la rutina…


domingo, 28 de febrero de 2010

De la rutina, solamente


Del cielo brotan suspiros
que cualquier bosque anhela cada mañana,
se posan sobre el cristal
que de mi se separan.
Yo, que desde el otro lado del cristal
veo como reposan y luego se van.
A mi mente llegas,
y pensarte he de comenzar.

Nuestro sol,
oculto tras las nubes,
hoy no dejó verse escapar.
Sin embargo su calor me visita,
aún cuando no lo he de invitar.
Aquí sigo, detrás del cristal,
entre lágrimas del cielo
y el pequeño legado del sol.
Aquí continuo,
esperando que este carruaje rentado
me lleve a mi destino,
y dejar mi pluma volar.

En mi mente sigues
y en mi mente te quedas,
así como una vez
mi corazón invadiste,
y de él jamás te fuiste.

Por eso a ti te dedico estas lineas,
que hablan de un pequeño momento en mi vida,
que como en cada uno de mis dias,
pasas por mi mente y me visitas.


http://www.mundopoesia.com/foros/poemas-de-amor/181761-de-la-rutina-solamente.html