jueves, 20 de febrero de 2014

¡qué difícil ser fácil!


Lo malcriado en nosotros pudiese considerarse como un cuadro viral con el que nos acostumbramos a vivir: eso está dando. Es típico. Y se le atribuye en un principio a una interpretación errónea de los amores primarios. De ahí quizás lo morfológico del término. Con el pasar del tiempo se pasa a la inconformidad, para luego enrumbarse en una incansable búsqueda hacia el temor. Finalmente; el objetivo yace en la admiración. Así pues solemos creer que mejor nos admira quien nos teme que quien nos ama. No dejamos de evocar a la infancia. Algunos estudiosos le dicen depresión, porque a lo mejor en ello se esbozan atisbos de inseguridad, puede ser, pero si deliramos un poco, y nos creemos el cuento de que nuestra personalidad se forma de capas; cual cebolla, la inseguridad se pela primero y por pelarse mal, además de llorar, en este caso nos deprimimos. Llegamos a la rabia, a la envidia, y confundimos todo eso con infelicidad. De ahí pasamos a las pastillas y a las prescripciones de químicos. En eso nos mantenemos, especialmente si descubrimos un buen vicio que nos justifique algún trastorno. Es que yo soy así. Pero el tiempo no deja de ser perfecto, y no es sólo el de Dios, por lo que dejarán algún día de temernos – quien sea que nos tema – y esa derrota nos la desquitamos con el amor. ¡Qué fácil ser difíciles! ¿no? O mejor dicho: ¡qué difícil ser fácil! Por eso el conflicto es una especie de paz y por eso la paz; siempre anda en conflicto…

13 comentarios:

  1. Cuando una persona con equilibrio emocional tiene en su haber las herramientas necesarias para combatir los pensamientos y acciones negativas que dañan su existencia, puede ser capaz de disfrutar cada día volviéndose más seguro, más creativo, más saludable.
    La posesión y la utilización correcta de estas herramientas, nos harán crecer, nos mostrarán como es la vida desde la perspectiva de hacer las cosas no más fáciles sino bien hechas.
    Abrir los ojos y mirar desde el corazón preguntándonos sinceramente, si somos felices viviendo de la manera en que lo hacemos y si estamos dispuestos a cambiar todo aquello que nos resta alegría, para procurarnos un estado emocional más acorde con lo que realmente deseamos y nos hace más felices, eso siempre contemplando como valora su nivel de felicidad cada persona. Una vida plena de satisfacciones, de alegrías, de plenitud personal ¿equivale a poseer dicha felicidad?
    No hablo de cosas superfluas y pasajeras que proporcionan alegría instantánea y breve, sino de pequeñas cosas del día a día que pueden perdurar para siempre y que solo nosotros podemos decidir que sea así.
    No hay fórmulas mágicas, nada es fácil o difícil, aunque todo conlleva un pequeño esfuerzo, solo así, la vida te devuelve con creces lo que tú aportas a tu vida; hemos de avanzar en el conocimiento de aquello que ignoramos, aprendiendo que aquello que vemos imposible, puede estar al alcance de nuestras manos si así lo queremos.
    Cada uno de nosotros, creamos nuestro día, mira, escucha, saborea, acaricia la vida, porque la vida va descontando días que no vuelven, lo que existe en cada uno de nosotros es lo que nosotros hemos creado.
    Amarremos nuestra nave en el lugar adecuado, después de haber recorrido un camino placentero, para que cuando llegue el momento de zarpar lo hagamos con el viento a favor , lleguemos a buen puerto y sintamos paz.
    Mar.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Puede ser, claro que sí, no obstante hay cierto peso en la adaptación, pero no es la idea original de ésta entrada, tiene que ver más bien con "cambiar todo aquello que nos resta alegría, para procurarnos un estado emocional más acorde con lo que realmente deseamos y nos hace más felices..." A veces, sólo a veces, el estado emocional acorde deviene de un punto de vista endógeno que ha sido creado - y consolidado - a partir de imposiciones foráneas... no sé, aquí pues delirando....
      Saludos en letras
      Gracias siempre ;-)

      Borrar
  2. No está mal delirar de cuando en cuando, pasamos demasiado tiempo dándole la mano a la cordura...el delirio me apasiona, es por eso que siempre voy a contracorriente...aunque esté mal visto. D. Quijote también solía hacerlo, así pues, Dulcinea toma buena nota de lo provechoso que pueden a veces ser los delirios....y deja que se le vaya la olla. :-)
    Aspas.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Claro que sí. No está ni está de más... Y bueno, delirio me dices; este blog se llama, precísamente, "a partir del delirio"
      Saludos ;-)

      Borrar
  3. aunque parezca un delirio, no lo es "NO DEJES TU FELICIDAD EN MANOS DE NADIE"...Porque a nadie debes dar nunca el poder de darte o quitarte esa felicidad....Con cariño.
    Allende.

    ResponderBorrar
  4. LA FELICIDAD....no existe.

    ResponderBorrar
  5. Solo existen pequeños retazos de ella, momentos que hemos de coger en el instante, antes de que desaparezcan o tarden en volver....con eso me conformo. Todas aquellas personas que tengan la posibilidad de ser felices en un mayor grado que el mío....aprovechen, cojan esas oportunidades y no las dejen escapar, los tesoros a veces no valen nada comparados a las pequeñas monedas, éstas pueden tener más valor a otros niveles que el tesoro más grande del mundo, tal vez porque todo el mundo cree que los tesoros existen y realmente no es así.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. En una entrada de este blog se me ocurrió decir:
      el valor no vale mucho tanto ni tantas veces como la necesidad...

      Borrar
  6. Los espías están a la orden del día...se plantea una cuestión bastante peliaguda, todo se complica en el mundo que vivimos cuando quieren coartar nuestras libertades, no hay contraseñas que puedan cambiarse, los espías son hábiles y los que somos espiados caemos en sus redes...que fácil es ser fácil para los que quieren engullirnos en sus fauces.
    Recurrimos a nuestra pequeña parcela de intimidad para no perder la poca libertad que nos queda, pero hay gente que no quiere perder el control de otros y hacen lo imposible por entrar en todos los rincones....hasta nueva orden habrá que mantenerse a buen recaudo...es cansado encontrar un poquito de libertad....muy muy cansado. Ahora mucha gente entenderá por qué no podemos movernos como quisiéramos; los espías acechan por nuestras vidas como Pedro por su casa, campando a sus anchas, hasta que casualmente, lo descubres y el mundo se te viene encima...dentro de poco habrá que pedir permiso hasta para respirar aunque solo sea lo necesario para poder vivir un poquito y sin molestar.....es todo.
    Robin Luna.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. exactamente igual a lo que me está pasando a mi y desde hace tiempo, apenas puedo moverme por internet, sin ser espiada, te entiendo a la perfección Robin....que gran impotencia!!!

      Angie

      Borrar
    2. durmiendo con el enemigo...
      Mª Jose Burgos

      Borrar
    3. Mindfulness calladitos y sin decirlo mucho, para atesorar lo más puro de nuestros pensares...

      Borrar

Gracias por tu visita y tu huella...