En mi búsqueda errante y en mi empeño en delirar (más que en deliberar) se me agruparon unas cuantas palabras que por alguna razón han fluido en una idea con música; mientras escuchaba ese coro: we’re up all night to get lucky… pensaba en el orgullo, en sus distintas manifestaciones. Algo encontré por ahí interesante, algo para compartir y quizás por eso algunos desvelos: para tener suerte y para, absorbido en alguna modalidad de orgullo, develar una simple inseguridad…
Traigo a colación:
Conductas que definen un orgullo nocivo para la vida
- Si vives pendiente de las apariencias y necesitas estar en primera fila, porque supones que perteneces a una clase superior.
- Si crees que tienes preferencia sobre todos.
- Si crees que nunca te equivocas y los demás sí.
- Si te has estancado en una posición y no admites otras opiniones ya que lo tuyo es lo perfecto.
- Si eres tú el que habla siempre, minimizando la opinión de los demás.
- Si te crees imprescindible y todo lo que posees es mejor que lo de los demás.
- Si no aceptas sugerencias para mejorar algo, solo porque no se te ocurrió a tí.
- Si te aferras a una postura defendiéndola sin límites y sin aceptar un margen de error o corrección, sin reconocer el fracaso.
- Si haces cosas contrarias a las que te dictan tus sentimientos aún dañando y dañándote.
Luego de tantos Sis, un No igualmente condicionado: cuando no eres ni estás seguro frente a un momento, sea con algo o con alguien. Un orgulloso a veces lo que quiere es no ser descubierto, no siempre se sabe qué hacer al no poder esconderse, la pretensión a rasgos genéricos es un motivo para darle gestos al rostro y ademanes al cuerpo. Ocultar algo nos sirve para exhibir un buen repertorio de ojitos…
Encontré un blog con otra postura: Admiro a la gente que sabe tragarse el orgullo teniendo una serenidad y templanza dignas de admiración… Aquí pues es el orgullo el escondido, entonces como que sí, como siempre vale la pena esconder algo…
Ocultamos mostrando y lo demostramos: en la voz que no dice y en las miradas que no ven; en la sonrisa que no se explica, en la rabia que no solemos contener…