Presuponían la pasión prohibida, la pasión con ingredientes; el escape repentino burlándose de la moral. Se contaban las mentiras que querían en verdades. Planearon todo, como toda película de realidades supuestas…
¿Por qué nunca la rutina se contempla en el final feliz?
Se escribían, se describían los momentos; el futuro a vivir y no viviendo. Compraron el pasaje a la aventura; nuevos sueños con boletos. Viajaron, se buscaron; se encontraron…
Nunca se reconocieron…