La contradicción como terapia y las dudas para el entretenimiento de carencias…
No sé si las palabras viven un otoño permanente, no atisbo primaveras de verdades verdes. No encuentro razón alguna en el placer de la ironía; en ese frenesí que produce opinar de lejos: desde lo cómodo que no se está sintiendo.
No sé si de tanto seguir, me olvido de los tropiezos que dañan mi camino, no estoy seguro de mantener el ritmo. No reconozco mis huellas, y al intentar verlas; solo veo las de siempre: las de quien sigo…
Se citan muchos sentimientos y se nos acaban las vocales llenas. Se hizo difícil pronunciar…
Adicción a la confusión y a momentos de pesadilla…
¡Apagar el televisor en momentos de opinión y noticias!
No sé si las palabras viven un otoño permanente, no atisbo primaveras de verdades verdes. No encuentro razón alguna en el placer de la ironía; en ese frenesí que produce opinar de lejos: desde lo cómodo que no se está sintiendo.
No sé si de tanto seguir, me olvido de los tropiezos que dañan mi camino, no estoy seguro de mantener el ritmo. No reconozco mis huellas, y al intentar verlas; solo veo las de siempre: las de quien sigo…
Se citan muchos sentimientos y se nos acaban las vocales llenas. Se hizo difícil pronunciar…
Adicción a la confusión y a momentos de pesadilla…
¡Apagar el televisor en momentos de opinión y noticias!