Siempre al pensarte al escribirte, me da por acariciar las teclas. Me da por evocarte y sentir de nuevo cada momento al que hemos puesto nuestros sentimientos. Cuando nos descubrimos y descubrimos el gusto, cuando nacieron los primeros Te amo, cuando empezó la costumbre del buenos días cada día, cuando nos dio por consumarnos ante Dios y los santos. Ser es estar a tu lado, Ser a tu lado amanecer…
Amanecer es amar y ser y es amar y nacer cada día…